El viernes Santo en Campo de Criptana, amanece temprano alrededor de las siete de la mañana con el traslado de Nuestro Padre Jesús Nazareno desde el Templo Parroquial a su Ermita, La Madre de Dios, donde partirá la procesión a las ocho de la mañana.
Desde aquí se inician de nuevo los paseillos al igual que el Jueves Santo, siendo los siguientes pasos los que acompañarán a Jesús de Nazareno en su procesión titular. El niño Pasionario, El Huerto de los Olivos, El beso de Judas, La Santa Cruz de la Merced, Jesús Cautivo en su Prendimiento, La Sentencia, El Santísimo Cristo de la Columna, San Pedro, Santa María Magdalena, Santa Mujer Verónica, Nuestro Padre Jesús de Nazareno y María Santísima de la Soledad Angustiada. Tras pasar esta por la Plaza Mayor, se inicia una segunda procesión que acabará uniéndose a la anterior en la Plaza del Calvario tras la segunda caída y encuentro de nuestro Señor con su Madre. Esta procesión es conocida por el Encuentro y forman parte de ella San Juan Apóstol y Nuestra Señora de los Dolores, la cual al realizar el encuentro con Jesús se unen al recorrido oficial de la procesión anterior, acompañando a Cristo en el final de su camino al monte de la Calavera.
La procesión finaliza en la Madre de Dios en torno a las dos del mediodía.